Los Cuidados Subóptimos de Mujeres con EAC se asocian a una Mayor Mortalidad a Largo Plazo


Los datos de un registro norteamericano aseguran que sí hay formas de, a menos, eliminar parcialmente la disparidad entre uno y otro género, es decir, entre hombres y mujeres hospitalizados por presentar patologías cardíacas. Después de abandonadar el hospital, las mujeres corren un mayor riesgo de mortalidad a los 3 años, 2/3 partes de esta diferencia parece deberse a unos “cuidados subóptimos” cuando estas reciben el alta hospitalaria, aseguran los investigadores.

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Aunque “gran parte” de la diferencia de mortalidad observada entre hombres y mujeres podría reducirse con unos cuidados óptimos, la obstinada mortalidad más alta descrita en pacientes afroamericanos “no nos envía un mensaje muy optimista,” asegura el autor del estudio.

“En teoría, en torno al 68% de la disparidad observada en la mortalidad podría reducirse o eliminarse con solo ofrecer a las mujeres cuidados óptimos basados en las directrices igual que hacemos con los hombres,”  tal y como aseguró el autor principal, Dr. Deepak L. Bhatt, del Hospital Brigham de Mujeres de Boston (Boston, MA), a TCTMD. Dijo que el análisis tuvo en cuenta a algunos pacientes que podrían presentar contraindicaciones legítimas como un aspecto del tratamiento o los cuidados recomendados

Junto con el autor principal, el Dr. Shanshan Li, de la  Facultad de Salud Pública T.H. Chan de la Universidad de Harvard (Boston, MA), Bhatt y sus colegas utilizaron datos del Registro ACTION-GWTG (Red de Resultados de Intervenciones y Tratamientos Angiográficos Agudos-Iniciativa Conozca las Directrices)para realizar un estudio de corte de 49.358 pacientes de > 65 años ingresados en 366 hospitales de EE.UU. entre 2003 y 2009. Las causas de las hospitalizaciones iban desde cuadros de aginas estables y cardiopatías isquémicas hasta cuadros de anginas inestables e IAM.

Los investigadores pretendían entender si un tratamiento de calidad óptima basado en aspirina tanto a las 24 horas como en el momento de recibir el alta hospitalaria, beta-bloqueadores en el momento de recibir el alta hospitalaria, inhibidores de la ECA/ARB, también en el momento de recibir el alta en pacientes con una fracción de eyección ventricular baja, asesoramiento para dejar de fumar y fármacos reductores de los niveles lipídicos podría mediar en los resultados. Los hallazgos se publicaron en Internet a principios de esta semana en Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes.

Las mujeres eran menos propensas que los hombres a recibir el tratamiento óptimo (CP-cociente de probabilidades 0.92; IC del 95% 0.88-0.95). Entre aquellos pacientes a quienes se les administró un tratamiento subóptimo, las mujeres tenían una mayor mortalidad a los 3 años que sus homólogos masculinos (CP 1.25; IC del 95% 1.00-1.05). La interacción entre sexo, calidad del tratamiento y riesgo de mortalidad fue importante a nivel estadístico (P para la interacción = .04).

“Aproximadamente el 69% de las disparidades de género podrían reducirse ofreciéndoles el tratamiento óptimo a las mujeres,” afirman los autores.

Cabe destacar que la calidad del tratamiento no varió en función de éste o aquel grupo racial/étnico ni en función de ésta o aquella región geográfica. Aunque los pacientes afroamericanos fueron 1/3 parte más propensos que los pacientes de raza blanca a fallecer a los 3 años (CP 1.33; IC del 95% 1.21-1.46), esta disparidad no mejoró para aquellos que recibieron el tratamiento óptimo.

Buenas y Malas Noticias

Reconociendo que los hallazgos hechos en las mujeres podrían verse como “vaso medio lleno o medio vacío,” dijo Bhatt, “la verdad es que los interpreto como buenas noticias porque quiere decir que sean cuales sean las diferencias de mortalidad entre mujeres y hombres, al menos, en lo que a las coronariopatías se refiere, gran parte de esta diferencia de mortalidad puede reducirse…aunque exige mucho esfuerzo. No siempre es fácil administrar el mejor tratamiento posible aunque esto no quiere decir que tengamos que descubrir mecanismo biológico desconocido.”

Dicho esto, añadió, podría haber alguna diferencia biológica que merece la pena estudiar más en profundidad.

El persistente riesgo de mortalidad descrito en pacientes afroamericanos “a pesar de que se administre un tratamiento excelente,” dijo Bhatt, “no envía un mensaje tan optimista.”

La administración del tratamiento depende mucho de la raza y del estatus socioeconómico, advirtió, “Pero incluso si estas disparidades en el tratamiento desaparecieran por arte de magia, nuestro estudio sugieren que los pacientes afroamericanos seguirían teniendo una mayor mortalidad, lo cual resulta preocupante y quiere decir que hay otros factores en juego. Y no son necesariamente factores biológicos, podría haber otras cosas que no estamos teniendo en cuenta como por ejemplo el acceso a la asistencia sanitaria o el estatus socioeconómico de un paciente, pero éste parece ser un mensaje que nos va a dar que pensar ya que esto no parece ser una situación que tenga fácil arreglo en los pacientes afroamericanos.”


Fuente:
Li S, Fonarow GC, Mukamal KJ, et al. Sex and race/ethnicity related disparities in care and outcomes after hospitalization for coronary artery disease among older adults. Circ Cardiovasc Qual Outcomes. 2016;Epub ahead of print.

Declaraciones:

  • Este estudio viene avalado por la beca a jóvenes investigadores Conozca las Directrices (Get With The Guidelines) que concede la Asociación Americana del Corazón (AHA)
  • Li no declaró conflicto de interés alguno.
  • Bhatt dijo ser miembro de las juntas asesoras de Cardax, Elsevier Practice Update Cardiology, Medscape Cardiology y Regado Biosciences; de la junta de directores del Instituto de Investigación de Veteranos de Boston, de la Sociedad de Cuidados Cardiovasculares del Paciente, presidente del Comité de Supervisión de la Calidad de la AHA; miembro de los comités de monitorización de datos del Instituto de Investigación Clínica de la Universidad de Duke, del Instituto de Investigación Clínica de la Universidad de Harvard, de la Clínica Mayo y del Instituto de Investigación de la Salud de la Población, co-investigador de Biotronik, Boston Scientific y St. Jude Medical y consejero del Colegio Americano de Cardiología (ACC). Dijo, también, haber recibido honorarios de ACC (como editor jefe asociado y participante en las secciones de Ensayos Clínicos y Noticias ACC.org), Belvoir Publications (editor jefe, Harvard Heart Letter), del Instituto de Investigación Clínica de la Universidad de Duke (comité de dirección sobre ensayos clínicos), del Instituto de Investigación Clínica de la Universidad de Harvard (comité de dirección sobre ensayos clínicos), de HMP Communications (editor jefe, Journal of Invasive Cardiology), Journal of the American College of Cardiology (editor invitado; editor asociado), del Instituto de Investigación de la Salud de la Población (comité de dirección sobre ensayos clínicos), Slack Publications (editor médico jefe, Cardiology Today’s Intervention), de la Sociedad de Cuidados Cardiovasculares del Paciente (secretario/tesorero) y de WebMD (comités de dirección de formación sobre médica continua), dijo, también, haber recibido financiación para su investigación de Amarin, AstraZeneca, Bristol-Myers Squibb, Eisai, Ethicon, Forest Laboratories, Ischemix, Medtronic, Pfizer, Roche, Sanofi Aventis y The Medicines Company y pagos correspondientes a derechos de autor de parte de Elsevier (editor, Cardiovascular Intervention: A Companion to Braunwald’s Heart Disease). También dijo formar parte de una investigación no financiada con FlowCo, PLx Pharma y Takeda.

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Caitlin E. Cox is News Editor of TCTMD and Associate Director, Editorial Content at the Cardiovascular Research Foundation. She produces the…

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