Relación Hemorragia Intrahospitalaria/Mortalidad tras Sufrir un NSTEMI

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Los pacientes ancianos que sufren un infarto de miocardio sin elevación del ST (NSTEMI) y tienen una hemorragia grave intrahospitalaria tienen más mortalidad tanto el primer mes como 3 años después de recibir el alta médica. No obstante, esta relación parece no ser causal, ya que la hemorragia solo es un marcador del riesgo subyacente, según se desprende de un estudio observacional a gran escala publicado en Internet el pasado 5 de marzo de 2012, previo a su edición impresa en el European Heart Journal.

El Dr. Renato D. Lopes, del Centro Médico de la Universidad de Duke (Durham, Carolina del Norte) y sus colegas analizaron los casos de 32.895 pacientes > 65 años con NSTEMI que fueron tratados entre noviembre de 2001 y diciembre de 2006. Los investigadores compararon los datos de los pacientes del registro CRUSADE con el historial de reclamaciones de Medicare para analizar la relación existente entre hemorragias y mortalidad a lo largo del tiempo.

Relación frente a Causalidad

En total, el 39,8% de los pacientes se sometieron a PCI durante la hospitalización frente a un 59,5% que no. Sobrevino hemorragia grave intrahospitalaria en el 11,9% de la cohorte general, en el 12,4% de los pacientes sometidos a una PCI y en el 11,6% de los no intervenidos.

Los pacientes de sexo femenino y aquellos con comorbididades tales como hipertensión, diabetes, enfermedad arterial periférica (EAD), insuficiencia cardíaca, accidente cerebrovascular (ACV) e intervenciones previas fueron más propensos a sufrir hemorragias. Asimismo, los pacientes hemorrágicos tenían niveles basales de creatinina en suero y de aclaramiento de creatinina más altos y niveles basales de hematocrito más bajos. El uso de heparina no fraccionada o inhibidores de la glicoproteína IIb/IIIa durante las primeras 24 hrs. de hospitalización también se asoció a mayores índices de hemorragia.

Las tasas de mortalidad acumulada aumentaron transcurridos 30 días, 1 año y 3 años en aquellos pacientes que sufrieron una hemorragia grave durante la primera hospitalización y sobrevivieron hasta el alta médica (gráfico 1).

Gráfico 1. Tasa de Mortalidad Tras Hemorragia Gave Intrahospitalaria

 

Hemorragia
(n = 3.902)

Sin hemorragia
(n = 28.993)

30 Días

8,40%

5,30%

1 Año

29,30%

21,00%

3 Años

50,50%

38,90%

 
La relación entre hemorragia intrahospitalaria grave y mortalidad, mucho más acusada los primeros 30 días, se mantuvo incluso después de ajustar las características basales, administrar fármacos antiplaquetarios, tras la cateterización cardíaca y tras la PCI (gráfico 2).

Gráfico 2. Efecto de la Hemorragia Grave Intrahospitalaria sobre la Mortalidad

 

CRI Ajustado

IC del 95%

Valor P 

Desde Alta Médica hasta 30 días

1,33

1,18-1,51

< 0,0001

31 Días a 1 Año

1,19

1,10-1,29

< 0,0001

1 Año a 3 Años

1,09

1,01-1,18

0,03

 
Transcurridos 3 años, esta asociación se atenúa en la población general (CRI Ajustado 1,14; IC del  95% 0,99-1,31; P = 0,0595), n así en pacientes sometidos a PCI (CRI Ajustado1,25; IC del 95% 1,01-1,54; P = 0,0404).

“A pesar del posible riesgo prematuro asociado a las hemorragias, la mayor duración del riesgo en pacientes hemorrágicos arroja una sombra de duda sobre su relación causal con la mortalidad a largo plazo, plantearon el Dr. Lopes y sus colegas. “Más bien, es probable que las hemorragias graves ayuden a identificar a aquellos pacientes que corren un riesgo subyacente de muerte.”

Las hemorragias graves “probablemente sean un marcador de comorbidades residuales no tenidas en cuenta, como por ejemplo la supresión de la médula ósea, debilidad, infección, malignidad, desnutrición, etc,” según los autores.

A corto plazo, la mortalidad “podría ser consecuencia directa de un episodio hemorrágico, imporante a nivel hemodinámico, o de una anemia subsecuente,” advierten los investigadores, que añadieron que los pacientes también podrían correr un mayor riesgo cuando se interrumpen temporalmente los fármacos antiplaquetarios. Prueba de ello es que el presente análisis descubrió que “los pacientes sometidos a PCI que sufren una hemorragia son menos propensos a recibir clopidogrel cuando reciben el alta médica.”

Es más, “todavía está por ver que evitando hemorragias en esta población de riesgo se mejoren los resultados a largo plazo,” concluyen.

Detalles del Estudio

Hemorragia grave se define como aquella que cumple 1 de los siguientes criterios:

  • Caída absoluta del hematocrito ≥ 12% unidades (38,4% de las hemorragias)
  • Hemorragia Intracraneal (0,5%)
  • Hemorragia retroperitoneal evidenciada (1,5%)
  • Hematocrito basal  28% + transfusión (71,8%)
  • Hematocrito basal < 28% + transfusión y hemorragia evidenciada (3,6%)

 


Fuente:
Lopes RD, Subherwal S, Holmes DN, et al. The association of in-hospital major bleeding with short-, intermediate-, and long-term mortality among older patients with non-ST-segment elevation myocardial infarction. Eur Heart J. 2012;Epub ahead of print.

 

Declaraciones:

  • El estudio CRUSADE está financiado por Schering-Plough. Bristol-Myers Squibb/Sanofi Pharmaceuticals Partnership, Millennium Pharmaceuticals y el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento proporcionaron financiamiento adicional.
  • El Dr. Lopes dice haber recibido una beca de investigación de Bristol-Myers Squibb.

 

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