Revisión de las Métricas de Rendimiento para el Uso de Estatinas Post-IM, Post-PCI en Pacientes EAC
El Colegio Americano
de Cardiología/Asociación Americana del Corazón (ACC/AHA) han actualizado los
indicadores de rendimientos asociados al uso de estatinas en prevención
secundaria, incluyendo a pacientes víctimas de un IAM, sometidos a una PCI
(intervención coronaria percutánea) o con enfermedad coronaria establecida y
enfermedad arterial periférica (EAP).
El Mensaje Joseph Drozda dice que al poner el acento en la toma de decisiones compartida, los actualizados indicadores del rendimiento no castigarán a los médicos si un paciente rechaza el tratamiento por cuestiones personales. |
Y por primera vez los indicadores de rendimiento reconocen la toma de decisiones compartida entre médico y paciente, no penalizando los indicadores ACC/AHA a los médicos si un paciente apto para tomar estatinas decide no hacerlo en contra de la prescripción médica.
“Pensamos que no era apropiado castigar a un médico o a un grupo médico cuando un paciente opta por no tomar su medicación atendiendo, única y exclusivamente, a sus propias preferencias personales,” dijo el Dr. Joseph Drozda, de Mercy Health (St. Louis, MO), a TCTMD.
Drozda, que presidió el comité de redacción dijo que esta es la primera vez que ACC y AHA han intentado incorporar la toma de decisiones compartida en los indicadores de rendimiento y que este proceso probablemente se refine en futuras versiones. El objetivo será “de hecho, premiar a los médicos que invierten tiempo en el proceso de toma de decisiones compartida,” dijo.
Publicado el pasado 14 de diciembre de 2015, en el Journal of the American College of Cardiology, ACC/AHA centraron su actualización en los indicadores de rendimiento lipídico en prevención secundaria incluyendo múltiples áreas clínicas. Los indicadores de rendimiento suelen abordar el manejo clínico en campos específicos tales como las PCI o la EAP. No obstante, con la publicación de las directrices sobre el manejo del colesterol publicadas por ACC/AHA en 2013, el grupo revisó 4 indicadores de rendimiento publicados anteriormente sobre el manejo de los lípidos. El propósito era asegurar que cada grupo de indicadores de rendimiento se alineaba con las nuevas directrices.
En suma, la actualización de ACC/AHA 2015 centrada en los indicadores de rendimiento lipídico aborda el uso de estatinas para el manejo de cuadros de EAP, STEMI (infarto de miocardio con elevación del segmento ST)/NSTEMI (infarto de miocardio sin elevación del segmento ST), PCI y EAC (enfermedad arterial coronaria). Además, los indicadores de rendimiento incluyen recomendaciones para el uso de estatinas en pacientes con enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ECVA) tal y como describen las directrices para el manejo del colesterol.
Derivado de la Evidencia Más Sólida
Para TCTMD, Drozda explicó que los indicadores de rendimiento se basan en recomendaciones en las directrices clínicas con el nivel más sólido de evidencia, que suele derivarse de datos basados en ensayos controlados aleatorizados. Teniendo en cuenta las directrices sobre el manejo de colesterol de 2013, concibieron indicadores de rendimiento en prevención secundaria atendiendo a la solidez de la evidencia que avala el uso de estatinas en esta población.
“Analizamos las recomendaciones 1a y las convertimos en indicadores de rendimiento con la suposición de que lo que aseguran dichas recomendaciones es lo que, en realidad, los médicos deberían de hacer,” dijo Drozda. “Sea cual sea la recomendación, es mucho más que solo una sólida sugerencia.”
Los indicadores de rendimiento pueden utilizarse a efectos de responsabilidad, en programas de rendimiento de pago y en sistemas de información pública. Pueden usarse para valorar el rendimiento del equipo cardiovascular o del sistema de salud cardiovascular a fin de determinar su adherencia a las directrices, dijo Drozda. Suelen crearse para abordar deficiencias en el tratamiento.
“Se utilizan indicadores del rendimiento en programas en los que hay lagunas, en los que las cosas no suceden como deberían,” advirtió Drozda. “Echamos un vistazo para ver cómo iban las prescripciones de estatinas en estas poblaciones de pacientes, las que padecen enfermedad cardiovascular establecida, y descubrimos que las cifras no son lo que diríamos impresionantes. En recientes estudios, en torno al 40%-83% de los pacientes con enfermedad establecida reciben una prescripción de estatinas.”
Los indicadores de rendimiento ahora tienen en cuenta la dosis de estatinas tal y como recomiendan las directrices clínicas. En el caso tanto de la EAP como de la EAC, los equipos hospitalarios o los sistemas de atención sanitaria serán valorados atendiendo a cuántos pacientes se les ofrecen estatinas de intensidad entre moderada y alta. En el caso del manejo de cuadros de STEMI/NSTEMI, el indicador de rendimiento analizará el porcentaje de pacientes a quienes se les ofrecen estatinas de intensidad entre moderada y alta. En el caso de la PCI, la métrica es el porcentaje de pacientes a quienes se les ofrece el tratamiento médico óptimo, que incluye estatinas.
“Esto es lo que dicen las directrices,” concluyó Drozda. “Una de las lagunas es que, en realidad, los pacientes que están a tratamiento con estatinas podrían estar tomando dosis demasiado bajas como para propiciar algún beneficio sobre la mortalidad.”
Fuente:
Drozda JP, Ferguson TB, Jneid H, et al. 2015 ACC/AHA focused update of secondary prevention lipid performance measures. J Am Coll Cardiol. 2015;Epub ahead of print.
Declaraciones:
- Drozda no declaró conflicto de interés alguno.
Artículos Relacionados:
Michael O’Riordan is the Managing Editor for TCTMD. He completed his undergraduate degrees at Queen’s University in Kingston, ON, and…
Read Full Bio
Comments