Un Registro Confirma Supervivencia a Largo Plazo de las Mujeres tras la Implantación de un Stent

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En la práctica actual norteamericana, las mujeres tienen un mayor riesgo a corto plazo tras la colocación de un stent que los hombres pero, en última instancia, tienen una mayor supervivencia a largo plazo, según los hallazgos de un registro publicados en Internet el pasado 24 de septiembre de 2012, previo a su edición impresa en Circulation. No obstante, los stents liberadores de fármacos (SLF) se asocian a unos mejores resultados a largo plazo en ambos sexos que los stents de metal desnudo (SMD).

La Dra. Monique Anderson, del Centro Médico de la Universidad de Duke (Durham, Carolina del Norte), y sus colegas recopilaron datos de 426.996 pacientes de más de 65 años del Registro Nacional de Datos Cardiovasculares y de las reclamaciones de pacientes hospitalarios de Medicare. Los pacientes, el 42.3% de los cuales eran mujeres (n = 180.752) se sometieron a la implantación de un stent en 946 centros, entre enero de 2004 y diciembre de 2008. Aproximadamente ¾ partes recibieron un SLF.

Las mujeres tenían más edad que los varones (media de edad de 75.8 frente a 74.1 años) y eran más propensas a tener antecedentes de diabetes, insuficiencia cardíaca crónica e hipertensión. Los varones, por su parte, eran más propensos a padecer hiperlipidemia, antecedentes de IM y CABG.

Las Mujeres Mantienen una ligera Ventaja a Largo Plazo

Comparadas con los hombres, las mujeres arrojaron índices intra hospitalarios más altos de mortalidad, hemorragias, IM perioperatorios, complicaciones vasculares y shock cardiogénico (tabla 1).

Tabla 1. Resultados intra Hospitalarios en Mujeres y Hombres

 

Hombres
(n = 246.244)

Mujeres
(n = 180.752)

CP Ajustado
(I95%)

Muerte

1.6%

2.2%

1.41 (1.33-1.49)

Hemorragias

2.3%

4.4%

1.86 (1.79-1.93)

Todas las Complicaciones Vasculares

0.7%

1.3%

1.85 (1.73-1.99)

IM Perioperatorios

1.2%

1.3%

1.19 (1.11-1.27)

Shock Cardiogénico

0.6%

0.9%

1.59 (1.47-1.73)

Abreviaturas: CP: cociente de probabilidades

Tras 900 días de seguimiento, las mujeres arrojaron índices no ajustados más bajos de muerte, revascularización y hemorragia pero no de IM. Los resultados ajustados a largo plazo calculados tras unos 20.4 meses de seguimiento, de media, sin embargo, no hallaron relación alguna entre la mortalidad y el sexo (tabla 2).

Tabla 2. Resultados a Largo Plazo en Mujeres y Hombres

 

Hombres
(n = 246.244)

Mujeres
(n = 180.752)

CP Ajustado
(I95%)

Muerte

15.8%

16.3%

0.92 (0.90-0.94)

Cualquier IM

7.6%

7.8%

0.99 (0.95-1.03)

Revascularización

22.3%

19.8%

0.99 (0.97-1.02)

Hemorragias

3.4%

3.7%

1.03 (0.98-1.09)

Abreviaturas: CP: cociente de probabilidades

Además, la incidencia no ajustada a largo plazo de muerte fue más baja en pacientes tratados con un SLF que en aquellos tratados con un SMD tanto para mujeres (14.0% frente al 23.0%) como para hombres (13.6% frente al 21.8%). Esta relación entre los SLF y una mayor supervivencia se mantuvo tras ajustar por mujeres (cociente de riesgos instantáneos-CRI ajustado 0.78; IC del 95% 0.76-0.81) y hombres (CRI ajustado 0.77; IC del 95% 0.74-0.79). El uso de SLF también mejoró los índices de episodios a largo plazo para los IM y la revascularización en ambos sexos. En líneas generales, hombres y mujeres se beneficiaron por igual del uso de SLF frente a SMD (P para interacción = 0.63).

Los Factores Causantes se Desconocen

A pesar de ajustar por muchas variables clíncias, el hecho de que las mujeres seguían teniendo un mayor riesgo de muerte intra hospitalaria sugiere “que los recientes avances hechos en materia de asistencia…tales como el establecimiento de guías y directrices en función del sexo para terapias anticoagulación basadas en el peso, la dispobilidad de tratamientos más pequeños basados en los stents y dispositivos de abordaje vascular más pequeños están, o bien, infrautilizados o no han eliminado, todavía, la disparidad sexo-mortalidad,” comentan los autores. Los posibles culpables de esta persitente diferencia en el resultados podrían ser el manejo prehospitalario del síndrome coronario agudo (SCA), las diferencias operatorias durante las intervenciones coronarias percutáneas (PCI) y el uso y dosis de terapias adyuvantes.

Además, cunque los episodios adversos netos fueron bajos, “el sexo sigue siendo un importante factor de riesgo para la muerte y las complicaciones intra hospitalarias y el estudio enfatiza la necesidad de seguir investigando en este campo,” aseguran el Dr. Anderston y sus colaboradores.

Aunque las razones por las que a las mujeres les va mejor que a los hombres, a largo plazo, se desconocen, los investigadores añaden, “es posible que una vez que a la mujer se le diagnostica una enfermedad de las arterias coronarias (EAC) (como por ejemplo, tras la colocación del primer stent), reciba más atención preventiva secundaria agresiva y más atención de la EAC sintomática recurrente (tal y como evidencian los índices idénticos de revascularización) resultando, por tanto, en similares resultados clínicos a largo plazo comparadas con los hombres en la era actual de colocación de stents.

En cuanto al interminable debate SMD frente a SLF, los investigadores sugieren que la ventaja de los SLF en el presente estudio podría reflejar el hecho de que los SMD se prefirieron en pacientes de mayor riesgo. “En cualquier caso, resulta interesante que, si operan factores de confusion, sus efectos parecen aplicarse, por igual, a hombres y mujeres,” concluyen.


Fuente:
Anderson M, Peterson ED, Brennan JM, et al. Acute and long-term outcomes of coronary stenting in women vs. men: Results from the National Cardiovascular Data Registry Centers for Medicare & Medicaid Services cohort. Circulation. 2012;Epub ahead of print.

 

Declaraciones:

  • La Dra. Anderson no declarón conflicto de interés económico alguno.

 

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